7 '¿Quién eres tú, oh gran monte? Ante Zorobabel, te convertirás en llanura; y él sacará la piedra clave entre aclamaciones de "¡Gracia, gracia a ella!"'"
8 Y vino a mí la palabra del Señor:
9 "Las manos de Zorobabel han puesto los cimientos de esta casa, y sus manos la acabarán. Entonces sabrán que el Señor de los ejércitos me ha enviado a ustedes.
10 ¿Pues quién ha despreciado el día de las pequeñeces? Estos siete se alegrarán cuando vean la plomada en la mano de Zorobabel; estos son los ojos del Señor que recorren toda la tierra."
11 Entonces le pregunté: "¿Qué son estos dos olivos a la derecha y a la izquierda del candelabro?"
12 Hablé por segunda vez, y le pregunté: "¿Qué son las dos ramas de olivo que están junto a los dos tubos de oro, que vierten de sí el aceite dorado?"
13 Y me respondió: "¿No sabes qué son éstos?" Y yo le contesté: "No, señor mío."