25 ¡Ay de ustedes, los que ahora están saciados! Porque tendrán hambre. ¡Ay de ustedes, los que ahora ríen! Porque se lamentarán y llorarán.
26 ¡Ay de ustedes, cuando todos los hombres hablen bien de ustedes! Porque de la misma manera trataban sus padres a los falsos profetas.
27 "Pero a ustedes los que oyen, les digo: amen a sus enemigos; hagan bien a los que los aborrecen;
28 bendigan a los que los maldicen; oren por los que los insultan.
29 Al que te hiera en la mejilla, preséntale también la otra; y al que te quite la capa, no le niegues tampoco la túnica.
30 A todo el que te pida, dale, y al que te quite lo que es tuyo, no se lo reclames.
31 Y así como quieran que los hombres les hagan a ustedes, hagan con ellos de la misma manera.