26 Siguió el ejemplo de Jeroboam, hijo de Nabat, en cuanto a todos los pecados que Jeroboam había cometido y que hizo cometer a Israel. Con sus ídolos inútiles, el pueblo provocó el enojo del Señor, Dios de Israel.
27 Los demás acontecimientos del reinado de Omri, el alcance de su poder y todo lo que él hizo están registrados en El libro de la historia de los reyes de Israel.
28 Cuando Omri murió, lo enterraron en Samaria. Luego su hijo Acab lo sucedió en el trono de Israel.
29 Acab, hijo de Omri, comenzó a gobernar Israel en el año treinta y ocho del reinado de Asa, rey de Judá; y reinó en Samaria veintidós años.
30 Sin embargo, Acab, hijo de Omri, hizo lo malo a los ojos del Señor, peor aún que todos los reyes anteriores.
31 Y como si fuera poco haber seguido el ejemplo de Jeroboam, se casó con Jezabel, hija del rey Et-baal, de los sidonios, y comenzó a inclinarse y a rendir culto a Baal.
32 Primero construyó un templo y un altar para Baal en Samaria.