15 Entonces el Señor le dijo:—Regresa por el mismo camino que viniste y sigue hasta el desierto de Damasco. Cuando llegues allí, unge a Hazael para que sea rey de Aram.
16 Después unge a Jehú, nieto de Nimsi, para que sea rey de Israel; y unge a Eliseo, hijo de Safat, de la tierra de Abel-mehola, para que tome tu lugar como mi profeta.
17 ¡A cualquiera que escape de Hazael, Jehú lo matará; y a los que escapen de Jehú, Eliseo los matará!
18 Sin embargo, preservaré a otros siete mil en Israel, ¡quienes nunca se han inclinado ante Baal ni lo han besado!
19 Entonces Elías fue y encontró a Eliseo, hijo de Safat, arando un campo. Había doce pares de bueyes en el campo, y Eliseo araba con el último par. Elías se acercó a él, le echó su manto sobre los hombros y siguió caminando.
20 Eliseo dejó los bueyes donde estaban, salió corriendo detrás de Elías y le dijo:—Deje que primero me despida de mis padres con un beso y luego iré con usted.Elías respondió:—Regresa, pero piensa en lo que te hice.
21 Entonces Eliseo regresó a donde estaban sus bueyes y los mató. Con la madera del arado hizo una fogata para asar la carne. Repartió la carne asada entre la gente del pueblo, y todos comieron. Después se fue con Elías como su ayudante.