1 En el tercer año del reinado de Ciro de Persia, Daniel (también llamado Beltsasar) tuvo otra visión. Comprendió que la visión tenía que ver con sucesos que ciertamente ocurrirían en el futuro, es decir tiempos de guerra y de grandes privaciones.
2 Cuando recibí esta visión, yo, Daniel, había estado de luto durante tres semanas enteras.
3 En todo ese tiempo no comí nada pesado. No probé carne ni vino, ni me puse lociones perfumadas hasta que pasaron esas tres semanas.
4 El 23 de abril, mientras estaba de pie en la ribera del gran río Tigris,
5 levanté los ojos y vi a un hombre vestido con ropas de lino y un cinto de oro puro alrededor de la cintura.