2 Y Jacob comenzó a notar un cambio en la actitud de Labán hacia él.
3 Entonces el Señor le dijo a Jacob: «Regresa a la tierra de tu padre y de tu abuelo, y a tus parientes de allí y yo estaré contigo».
4 Entonces Jacob mandó llamar a Raquel y a Lea al campo donde él cuidaba el rebaño
5 y les dijo:—Noto un cambio en la actitud de su padre hacia mí, pero el Dios de mi padre ha estado conmigo.
6 Ustedes saben con cuánto esfuerzo trabajé para su padre;
7 sin embargo, me ha estafado, cambiando mi salario diez veces. Pero Dios no le ha permitido que me haga ningún daño.
8 Pues, si él decía: “Los animales manchados serán tu salario”, todo el rebaño comenzaba a dar crías manchadas. Y cuando él cambiaba de opinión y decía: “Los animales rayados serán tu salario”, entonces todo el rebaño producía crías rayadas.