2 Las mujeres de Moab fueron abandonadas como aves sin nidoen los vados del río Arnón.
3 «Ayúdennos —claman—,defiéndannos de nuestros enemigos.Protéjannos de sus ataques implacables;no nos traicionen ahora que hemos escapado.
4 Permitan que nuestros refugiados se queden entre ustedes;escóndanlos de nuestros enemigos hasta que haya pasado el terror».Cuando hayan terminado la opresión y la destrucción,y hayan desaparecido los saqueadores enemigos,
5 Dios establecerá como rey a uno de los descendientes de David.Él reinará con misericordia y verdad;hará siempre lo que es justoy estará deseoso de hacer lo correcto.
6 Hemos oído hablar del soberbio Moab,de su orgullo, de su arrogancia y de su furia;pero todo su alarde ha desaparecido.
7 Toda la tierra de Moab llora;sí, todos se lamentan en Moabpor los pasteles de pasas de Kir-hareset.Ya no queda ninguno.
8 Las granjas de Hesbón están abandonadas;los viñedos de Sibma están desiertos.Los gobernantes de las naciones han quebrantado a Moab,esa vid tan hermosa.Sus zarcillos se extendían hacia el norte hasta la ciudad de Jazery trepaban hacia el oriente hasta entrar en el desierto.Sus sarmientos se extendían tan lejos hacia el occidenteque cruzaban por encima del mar Muerto.