8 En un estallido de enojo aparté de ti mi rostro por un poco de tiempo.Pero con amor eterno tendré compasión de ti—dice el Señor, tu Redentor—.
9 »Así como juré en tiempos de Noéque nunca más permitiría que un diluvio cubra la tierra,ahora también juroque nunca más me enojaré contigo ni te castigaré.
10 Pues las montañas podrán moversey las colinas desaparecer,pero aun así mi fiel amor por ti permanecerá;mi pacto de bendición nunca será roto—dice el Señor, que tiene misericordia de ti—.
11 »¡Oh ciudad azotada por las tormentas,atribulada y desolada!Te reconstruiré con joyas preciosasy haré tus cimientos de lapislázuli.
12 Haré tus torres de rubíes relucientes,tus puertas de gemas brillantesy tus muros de piedras preciosas.
13 Yo les enseñaré a todos tus hijos,y ellos disfrutarán de una gran paz.
14 Estarás segura bajo un gobierno justo e imparcial;tus enemigos se mantendrán muy lejos.Vivirás en paz,y el terror no se te acercará.