19 ¡Miren! El enojo de Dios estalla como una tormenta,como un torbellino que se arremolina sobre las cabezas de los perversos.
20 El enojo del Señor no disminuiráhasta que termine con todo lo que él tenía pensado.En los días futuros,ustedes entenderán todo esto con claridad.
21 »Yo no envié a estos profetas,sin embargo, van de un lado a otro afirmando hablar en mi nombre.No les he dado ningún mensaje,pero aun así siguen profetizando.
22 Si hubieran estado en mi presencia y me hubieran escuchado,habrían hablado mis palabrasy habrían hecho que mi pueblo se apartarade sus malos caminos y sus malas acciones.
23 ¿Soy acaso Dios solo de cerca? —dice el Señor—,no, al mismo tiempo estoy lejos.
24 ¿Puede alguien esconderse de mí en algún lugar secreto?¿Acaso no estoy en todas partes en los cielos y en la tierra?—dice el Señor.
25 »He oído a estos profetas decir: “Escuchen el sueño que Dios me dio anoche”. Y después pasan a decir mentiras en mi nombre.