26 Nabuzaradán, capitán de la guardia, los llevó a todos ante el rey de Babilonia, que se encontraba en Ribla.
27 Allí, en Ribla, en la tierra de Hamat, el rey de Babilonia mandó que los ejecutara a todos. Así que el pueblo de Judá fue expulsado de su tierra y llevado al destierro.
28 El número de cautivos llevados a Babilonia en el séptimo año del reinado de Nabucodonosor fue de tres mil veintitrés.
29 Más adelante, en el año dieciocho de Nabucodonosor, se llevó a ochocientos treinta y dos más.
30 En el año veintitrés del reinado de Nabucodonosor, él envió a Nabuzaradán, capitán de la guardia, quien se llevó consigo a setecientos cuarenta y cinco más, un total de cuatro mil seiscientos cautivos.
31 En el año treinta y siete del exilio de Joaquín, rey de Judá, Evil-merodac ascendió al trono de Babilonia. El nuevo rey fue bondadoso con Joaquín y lo puso en libertad el 31 de marzo de ese año.
32 Le habló con amabilidad y le dio una posición superior a la de los demás reyes exiliados en Babilonia.