3 Así que Moisés le dijo a Aarón: «Esto quiso decir el Señor cuando dijo:“Demostraré mi santidadpor medio de los que se acercan a mí.Demostraré mi gloriaante todo el pueblo”».Y Aarón guardó silencio.
4 Después Moisés llamó a Misael y a Elzafán, primos de Aarón e hijos de Uziel —que era tío de Aarón— y les dijo: «Vengan y llévense los cuerpos de sus parientes de delante del santuario a un lugar fuera del campamento».
5 Entonces se acercaron, los agarraron por la ropa y los llevaron fuera del campamento, tal como Moisés lo había mandado.
6 Luego Moisés les dijo a Aarón y a sus hijos Eleazar e Itamar: «No rasguen su ropa ni dejen de peinarse en señal de dolor. Si lo hacen morirán, y el enojo del Señor herirá a toda la comunidad de Israel. Sin embargo, el resto de los israelitas, sus parientes, podrán hacer duelo a causa de la destrucción por fuego de Nadab y Abiú que hizo el Señor.
7 Pero no salgan de la entrada del tabernáculo o morirán, porque ustedes fueron ungidos con el aceite de unción del Señor». Entonces hicieron lo que Moisés les ordenó.
8 Después el Señor le dijo a Aarón:
9 «Tú y tus descendientes nunca deben beber vino ni ninguna otra bebida alcohólica antes de entrar en el tabernáculo. Si lo hacen, morirán. Esta es una ley perpetua para ustedes, que se cumplirá de generación en generación.