22 »Si uno de los líderes de Israel peca al violar uno de los mandatos del Señor su Dios, pero no se da cuenta de ello, aun así es culpable.
23 En cuanto se dé cuenta de su pecado, debe llevar como ofrenda un chivo sin defecto.
24 Pondrá la mano sobre la cabeza del chivo y lo matará en el lugar donde se matan las ofrendas quemadas ante el Señor. Esta es una ofrenda por su pecado.
25 Luego el sacerdote mojará su dedo en la sangre de la ofrenda por el pecado y la pondrá en los cuernos del altar para las ofrendas quemadas, y derramará el resto de la sangre al pie del altar.
26 Después debe quemar toda la grasa del chivo sobre el altar, así como lo hace con la ofrenda de paz. Mediante este proceso, el sacerdote purificará al líder de su pecado, lo hará justo ante el Señor, y será perdonado.
27 »Si alguien de la gente común peca al violar uno de los mandatos del Señor, pero no se da cuenta de ello, aun así es culpable.
28 Cuando se dé cuenta de su pecado, deberá llevar como ofrenda por su pecado una cabra sin defecto.