1 ¡Formen las tropas!El enemigo pone sitio a Jerusalén.Con una vara golpeará al líder de Israel en la cara.
2 Pero tú, oh Belén Efrata,eres solo una pequeña aldea entre todo el pueblo de Judá.No obstante, de ti saldrá un gobernante para Israel,cuyos orígenes vienen desde la eternidad.
3 El pueblo de Israel será entregado a sus enemigoshasta que dé a luz la mujer que está de parto.Entonces, por fin, sus compatriotasvolverán del destierro a su propia tierra.
4 Y él se levantará para dirigir a su rebaño con la fuerza del Señory con la majestad del nombre del Señor su Dios.Entonces su pueblo vivirá allí tranquilo,porque él es exaltado con honores en todas partes.
5 Y él será la fuente de paz.Cuando los asirios invadan nuestra tierray penetren en nuestras defensas,nombraremos a siete gobernantes para que nos vigilen,a ocho príncipes para que nos dirijan.
6 Ellos gobernarán a Asiria con la espada desenvainaday entrarán por las puertas de la tierra de Nimrod.Él nos rescatará de los asirioscuando desborden las fronteras para invadir nuestra tierra.
7 Entonces el remanente que quedó en Israelocupará su lugar entre las naciones.Será como rocío enviado por el Señoro como lluvia que cae sobre la hierba,la cual nadie puede controlarni hacer que se detenga.