8 ¡Enemigos míos, no se regodeen de mí!Pues aunque caiga, me levantaré otra vez.Aunque esté en oscuridad,el Señor será mi luz.
9 Seré paciente cuando el Señor me castigue,porque he pecado contra él.Pero después, él tomará mi casoy me hará justicia por todo lo que he sufrido a manos de mis enemigos.El Señor me llevará a la luzy veré su justicia.
10 Entonces mis enemigos verán que el Señor está de mi lado.Serán avergonzados los que se mofaban de mí diciendo:«Entonces, ¿dónde está el Señor,ese Dios tuyo?».Con mis propios ojos veré su ruina;como lodo en las calles serán pisoteados.
11 En aquel día, Israel, tus ciudades serán reconstruidasy tus fronteras se extenderán.
12 Vendrá gente de muchos países y te honrará;desde Asiria hasta las ciudades de Egipto,desde Egipto hasta el río Éufratesy desde los mares distantes y las montañas lejanas.
13 Sin embargo, la tierra se volverá vacía y desoladaa causa de la perversidad de los que la habitan.
14 Oh Señor, protege a tu pueblo con tu vara de pastor;guía a tu rebaño, tu posesión más preciada.Aunque viva solo en un matorralen lo alto del monte Carmelo,que se alimente en los fértiles pastos de Basán y Galaadcomo lo hacía en tiempos pasados.