8 Dios los sacó de Egipto;para ellos él es tan fuerte como un buey salvaje.Él devora a las naciones que se le oponen,quiebra sus huesos en pedazosy las atraviesa con flechas.
9 Como un león, Israel se agazapa y se tiende;como a una leona, ¿quién se atreve a despertarla?Bendito todo el que te bendice, oh Israel,y maldito todo el que te maldice».
10 Entonces el rey Balac se enfureció contra Balaam y en señal de enojo palmeó las manos y gritó:—¡Yo te llamé para maldecir a mis enemigos! En cambio, los has bendecido tres veces.
11 ¡Fuera de aquí ahora mismo! ¡Vuelve a tu casa! Te prometí una generosa recompensa, pero el Señor te ha impedido que la recibieras.
12 Balaam le dijo a Balac:—¿No recuerdas lo que expliqué a tus mensajeros? Dije:
13 “Aunque Balac me diera su palacio repleto de plata y oro, no podría hacer absolutamente nada en contra de la voluntad del Señor”. ¡Te advertí que únicamente podría decir lo que el Señor me dijera!
14 Ahora me regreso a mi propia gente, pero primero, déjame decirte lo que los israelitas harán a tu pueblo en el futuro.