1 »Cada año, el primer día del mes señalado, al principio del otoño, celebren el Festival de las Trompetas. Convoquen un día oficial para una asamblea santa y no hagan ningún trabajo habitual.
2 Ese día deben presentar una ofrenda quemada como aroma agradable al Señor: un becerro, un carnero y siete corderos de un año, todos sin defecto.
3 Estas deben ser acompañadas de las ofrendas de grano de harina selecta humedecidas con aceite de oliva: seis kilos con el becerro, cuatro kilos con el carnero
4 y dos kilos con cada uno de los siete corderos.
5 Además sacrifiquen un chivo como ofrenda por el pecado, para purificarse y hacerse justos ante el Señor.
6 Estos sacrificios especiales, junto con sus ofrendas obligatorias de grano y las ofrendas líquidas, son además de las ofrendas quemadas habituales, mensuales y diarias. Se las presenta como ofrenda especial al Señor, un aroma agradable a él.