16 «¡Qué terrible, qué terrible para esa gran ciudad!¡Ella se vestía de púrpura de la más alta calidad y lino escarlata,adornada con oro, piedras preciosas y perlas!
17 ¡En un solo instante,toda la riqueza de la ciudad se esfumó!».Y todos los capitanes de los barcos mercantes y los pasajeros, los marineros y las tripulaciones se mantendrán a distancia.
18 Todos clamarán cuando vean subir el humo y dirán: «¿Dónde habrá una ciudad de tanta grandeza como esta?».
19 Y llorarán y echarán tierra sobre su cabeza para mostrar su dolor y clamarán:«¡Qué terrible, qué terrible para esa gran ciudad!Los dueños de barcos se hicieron ricostransportando por los mares la gran riqueza de ella.En un solo instante, se esfumó todo».
20 ¡Oh cielo, alégrate del destino de ella,y también ustedes pueblo de Dios, apóstoles y profetas!Pues al fin Dios la ha juzgadopor amor a ustedes.
21 Luego un ángel poderoso levantó una roca inmensa del tamaño de una gran piedra de molino, la lanzó al mar y gritó:«Así es como la gran ciudad de Babiloniaserá derribada con violenciay nunca más se encontrará.
22 Nunca más se oirá en ti el sonido de lasarpas, los cantantes, las flautas y las trompetas.No se encontrarán en tini artesanos ni comercio,ni se volverá a oírel sonido del molino.