2 Judas, el traidor, conocía ese lugar, porque Jesús solía reunirse allí con sus discípulos.
3 Los principales sacerdotes y los fariseos le habían dado a Judas un grupo de soldados romanos y guardias del templo para que lo acompañaran. Llegaron al huerto de olivos con antorchas encendidas, linternas y armas.
4 Jesús ya sabía todo lo que le iba a suceder, así que salió al encuentro de ellos.—¿A quién buscan? —les preguntó.
5 —A Jesús de Nazaret —contestaron.—Yo Soy —dijo Jesús.(Judas, el que lo traicionó, estaba con ellos).
6 Cuando Jesús dijo «Yo Soy», ¡todos retrocedieron y cayeron al suelo!
7 Una vez más les preguntó:—¿A quién buscan?Y nuevamente ellos contestaron:—A Jesús de Nazaret.
8 —Ya les dije que Yo Soy —dijo Jesús—, ya que soy la persona a quien buscan, dejen que los demás se vayan.