16 »¿Con qué puedo comparar a esta generación? Se parece a los niños que juegan en la plaza. Se quejan ante sus amigos:
17 “Tocamos canciones de bodas,y no bailaron;entonces tocamos cantos fúnebres,y no se lamentaron”.
18 »Pues Juan no dedicaba el tiempo a comer y beber, y ustedes dicen: “Está poseído por un demonio”.
19 El Hijo del Hombre, por su parte, festeja y bebe, y ustedes dicen: “¡Es un glotón y un borracho y es amigo de cobradores de impuestos y de otros pecadores!”. Pero la sabiduría demuestra estar en lo cierto por medio de sus resultados».
20 Luego Jesús comenzó a denunciar a las ciudades en las que había hecho tantos milagros, porque no se habían arrepentido de sus pecados ni se habían vuelto a Dios.
21 «¡Qué aflicción les espera, Corazín y Betsaida! Pues, si en las perversas ciudades de Tiro y de Sidón se hubieran hecho los milagros que hice entre ustedes, hace tiempo sus habitantes se habrían arrepentido de sus pecados vistiéndose con ropa de tela áspera y echándose ceniza sobre la cabeza en señal de remordimiento.
22 Les digo que, el día del juicio, a Tiro y a Sidón les irá mejor que a ustedes.