11 El tercer valiente era Sama hijo de Agué el ararita. En cierta ocasión, los filisteos formaron sus tropas en un campo sembrado de lentejas. El ejército de Israel huyó ante ellos,
12 pero Sama se plantó en medio del campo y lo defendió, derrotando a los filisteos. El Señor les dio una gran victoria.
13 En otra ocasión, tres de los treinta más valientes fueron a la cueva de Adulán, donde estaba David. Era el comienzo de la siega, y una tropa filistea acampaba en el valle de Refayin.
14 David se encontraba en su fortaleza, y en ese tiempo había una guarnición filistea en Belén.
15 Como David tenía mucha sed, exclamó: «¡Ojalá pudiera yo beber agua del pozo que está a la entrada de Belén!»
16 Entonces los tres valientes se metieron en el campamento filisteo, sacaron agua del pozo de Belén, y se la llevaron a David. Pero él no quiso beberla, sino que derramó el agua en honor al Señor
17 y declaró solemnemente: «¡Que el Señor me libre de beberla! ¡Eso sería como beberme la sangre de hombres que se han jugado la vida!» Y no quiso beberla.Tales hazañas hicieron esos tres héroes.