21 Entonces Dios el Señor hizo que el hombre cayera en un sueño profundo y, mientras éste dormía, le sacó una costilla y le cerró la herida.
22 De la costilla que le había quitado al hombre, Dios el Señor hizo una mujer y se la presentó al hombre,
23 el cual exclamó:«Ésta sí es hueso de mis huesosy carne de mi carne.Se llamará “mujer”porque del hombre fue sacada.»
24 Por eso el hombre deja a su padre y a su madre, y se une a su mujer, y los dos se funden en un solo ser.
25 En ese tiempo el hombre y la mujer estaban desnudos, pero ninguno de los dos sentía vergüenza.