19 Pero su padre se resistió, y le contestó:—¡Ya lo sé, hijo, ya lo sé! También él gestará a un pueblo, y llegará a ser importante. Pero su hermano menor será aún más importante, y su descendencia dará origen a muchas naciones.
20 Aquel día Jacob los bendijo así:«Ésta será la bendiciónque en Israel se habrá de pronunciar:“Que Dios cuide de ticomo cuidó de Efraín y de Manasés.”»De este modo, Israel dio a Efraín la primacía sobre Manasés.
21 Finalmente, Israel le dijo a José:—Yo estoy a punto de morir; pero Dios estará con ustedes y los hará volver a la tierra de sus antepasados.
22 Y a ti, que estás por encima de tus hermanos, te doy Siquén, tierra que luchando a brazo partido arrebaté a los amorreos.