18 »Vengan, pongamos las cosas en claro—dice el Señor—.¿Son sus pecados como escarlata?¡Quedarán blancos como la nieve!¿Son rojos como la púrpura?¡Quedarán como la lana!
19 ¿Están ustedes dispuestos a obedecer?¡Comerán lo mejor de la tierra!
20 ¿Se niegan y se rebelan?¡Serán devorados por la espada!»El Señor mismo lo ha dicho.
21 ¡Cómo se ha prostituido la ciudad fiel!Antes estaba llena de justicia.La rectitud moraba en ella,pero ahora sólo quedan asesinos.
22 Tu plata se ha convertido en escoria;tu buen vino, en agua.
23 Tus gobernantes son rebeldes,cómplices de ladrones;todos aman el sobornoy van detrás de las prebendas.No abogan por el huérfano,ni se ocupan de la causa de la viuda.
24 Por eso afirma el Señor,el Señor Todopoderoso,el Fuerte de Israel:«Me desquitaré de mis adversarios,me vengaré de mis enemigos.