4 »Préstame atención, pueblo mío;óyeme, nación mía:porque de mí saldrá la enseñanza,y mi justicia será luz para las naciones.
5 Ya se acerca mi justicia,mi salvación está en camino;¡mi brazo juzgará a las naciones!Las costas lejanas confían en mí,y ponen su esperanza en mi brazo.
6 Levanten los ojos al cielo;miren la tierra aquí abajo:como humo se esfumarán los cielos,como ropa se gastará la tierra,y como moscas morirán sus habitantes.Pero mi salvación permanecerá para siempre,mi justicia nunca fallará.
7 »Escúchenme, ustedes que conocen lo que es recto;pueblo que lleva mi ley en su corazón:No teman el reproche de los hombres,ni se desalienten por sus insultos,
8 porque la polilla se los comerá como ropay el gusano los devorará como lana.Pero mi justicia permanecerá para siempre;mi salvación, por todas las generaciones.»
9 ¡Despierta, brazo del Señor!¡Despierta y vístete de fuerza!Despierta, como en los días pasados,como en las generaciones de antaño.¿No fuiste tú el que despedazó a Rahab,el que traspasó a ese monstruo marino?
10 ¿No fuiste tú el que secó el mar,esas aguas del gran abismo?¿El que en las profundidades del mar hizo un caminopara que por él pasaran los redimidos?