2 ¡Sacúdete el polvo, Jerusalén!¡Levántate, vuelve al trono!¡Libérate de las cadenas de tu cuello,cautiva hija de Sión!
3 Porque así dice el Señor:«Ustedes fueron vendidos por nada,y sin dinero serán redimidos.»
4 Porque así dice el Señor omnipotente:«En tiempos pasados,mi pueblo descendió a Egipto y vivió allí;en estos últimos tiempos,Asiria los ha oprimido sin razón.
5 »Y ahora —afirma el Señor—,¿qué estoy haciendo aquí?Sin motivo se han llevado a mi pueblo;sus gobernantes se mofan de él.No hay un solo momentoen que mi nombre no lo blasfemen.
6 Por eso mi pueblo conocerá mi nombre,y en aquel día sabránque yo soy quien dice: “¡Aquí estoy!”»
7 ¡Qué hermosos son, sobre los montes,los pies del que trae buenas nuevas;del que proclama la paz,del que anuncia buenas noticias,del que proclama la salvación,del que dice a Sión: «Tu Dios reina»!
8 ¡Escucha! Tus centinelas alzan la voz,y juntos gritan de alegría,porque ven con sus propios ojosque el Señor vuelve a Sión.