5 Miré, pero no hubo quien me ayudara,me asombró que nadie me diera apoyo.Mi propio brazo me dio la victoria;¡mi propia ira me sostuvo!
6 En mi enojo pisoteé a los pueblos,y los embriagué con la copa de mi ira;¡hice correr su sangre sobre la tierra!»
7 Recordaré el gran amor del Señor,y sus hechos dignos de alabanza,por todo lo que hizo por nosotros,por su compasión y gran amor.¡Sí, por la multitud de cosas buenasque ha hecho por los descendientes de Israel!
8 Declaró: «Verdaderamente son mi pueblo,hijos que no me engañarán.»Así se convirtió en el Salvador
9 de todas sus angustias.Él mismo los salvó;no envió un emisario ni un ángel.En su amor y misericordia los rescató;los levantó y los llevó en sus brazoscomo en los tiempos de antaño.
10 Pero ellos se rebelarony afligieron a su santo Espíritu.Por eso se convirtió en su enemigo,y luchó él mismo contra ellos.
11 Su pueblo recordó los tiempos pasados,los tiempos de Moisés:¿Dónde está el que los guió a través del mar,como guía el pastor a su rebaño?¿Dónde está el que pusosu santo Espíritu entre ellos,