5 »Sus ídolos no pueden hablar;¡parecen espantapájarosen un campo sembrado de melones!Tienen que ser transportados,porque no pueden caminar.No les tengan miedo,que ningún mal pueden hacerles,pero tampoco ningún bien.»
6 ¡No hay nadie como tú, Señor!¡Grande eres tú,y grande y poderoso es tu nombre!
7 ¿Quién no te temerá, Rey de las naciones?¡Es lo que te corresponde!Entre todos los sabios de las naciones,y entre todos los reinos,no hay nadie como tú.
8 Todos son necios e insensatos,educados por inútiles ídolos de palo.
9 De Tarsis se trae plata laminada,y de Ufaz se importa oro.Los ídolos, vestidos de púrpura y carmesí,son obra de artífices y orfebres;¡todos ellos son obra de artesanos!
10 Pero el Señor es el Dios verdadero,el Dios viviente, el Rey eterno.Cuando se enoja, tiembla la tierra;las naciones no pueden soportar su ira.
11 «Así les dirás: “Los dioses que no hicieron los cielos ni la tierra, desaparecerán de la tierra y de debajo del cielo.”»