14 Sáname, Señor, y seré sanado;sálvame y seré salvado,porque tú eres mi alabanza.
15 No falta quien me pregunte:«¿Dónde está la palabra del Señor?¡Que se haga realidad!»
16 Pero yo no me he apresuradoa abandonarte y dejar de ser tu pastor,ni he deseado que venga el día de la calamidad.Tú bien sabes lo que he dicho,pues lo dije en tu presencia.
17 No seas para mí un motivo de terror;tú eres mi refugio en tiempos de calamidad.
18 ¡No me pongas a mí en vergüenza;avergüénzalos a ellos!¡No me llenes de terror a mí;aterrorízalos a ellos!Envíales tiempos difíciles;¡destrózalos, y vuelve a destrozarlos!
19 Así me dijo el Señor: «Ve y párate en la puerta del Pueblo, por donde entran y salen los reyes de Judá, y luego en todas las puertas de Jerusalén,
20 y diles: “¡Escuchen la palabra del Señor, reyes de Judá, y toda la gente de Judá y todos los habitantes de Jerusalén que entran por estas puertas!