23 Así dice el Señor:«Que no se gloríe el sabio de su sabiduría,ni el poderoso de su poder,ni el rico de su riqueza.
24 Si alguien ha de gloriarse,que se gloríe de conocermey de comprender que yo soy el Señor,que actúo en la tierra con amor,con derecho y justicia,pues es lo que a mí me agrada—afirma el Señor—.
25 »Vienen días —afirma el Señor— en que castigaré al que sólo haya sido circuncidado del prepucio:
26 castigaré a Egipto, Judá, Edom, Amón, Moab, y a todos los que viven en el desierto y se rapan las sienes. Todas las naciones son incircuncisas, pero el pueblo de Israel es incircunciso de corazón.»