1 A esto respondió así Elifaz de Temán:
2 «Tal vez no puedas aguantarque alguien se atreva a decirte algo,pero ¿quién podría contener las palabras?
3 Tú, que impartías instrucción a las multitudesy fortalecías las manos decaídas;
4 tú, que con tus palabras sostenías a los que tropezabany fortalecías las rodillas que flaqueaban;
5 ¡ahora que afrontas las calamidades, no las resistes!;¡te ves golpeado y te desanimas!