25 Las palabras justas no ofenden,¡pero los argumentos de ustedes no prueban nada!
26 ¿Me van a juzgar por mis palabras,sin ver que provienen de un desesperado?
27 ¡Ustedes echarían suertes hasta por un huérfano,y venderían a su amigo por cualquier cosa!
28 »Tengan la bondad de mirarme a los ojos;¿Creen que les mentiría en su propia cara?
29 Reflexionen, no sean injustos;reflexionen, que en esto radica mi integridad.