11 Los jinetes informaron al ángel del Señor, que estaba entre los arrayanes: «Hemos recorrido toda la tierra. Por cierto, la encontramos tranquila y en paz.»
12 Ante esto, el ángel del Señor replicó: «Señor Todopoderoso, ¿hasta cuándo te negarás a compadecerte de Jerusalén y de las ciudades de Judá, con las que has estado enojado estos setenta años?»
13 El Señor le respondió con palabras buenas y consoladoras al ángel que hablaba conmigo,
14 y luego el ángel me dijo: «Proclama este mensaje de parte del Señor Todopoderoso:»“Mi amor por Sión y por Jerusalénme hace sentir celos por ellas.
15 En cambio, estoy lleno de iracon las naciones engreídas.Mi enojo no era tan grave,pero ellas lo agravaron más.”
16 »Por lo tanto, así dice el Señor:“Volveré a compadecerme de Jerusalén.Allí se reconstruirá mi templo,y se extenderá el cordel de medir, afirma el Señor Todopoderoso.”
17 »Proclama además lo siguiente de parte del Señor Todopoderoso:»“Otra vez mis ciudades rebosarán de bienes,otra vez el Señor consolará a Sión,otra vez escogerá a Jerusalén.”»