1 Hijos, obedezcan en el Señor a sus padres, porque esto es justo.
2 «Honra a tu padre y a tu madre —que es el primer mandamiento con promesa—
3 para que te vaya bien y disfrutes de una larga vida en la tierra.»
4 Y ustedes, padres, no hagan enojar a sus hijos, sino críenlos según la disciplina e instrucción del Señor.
5 Esclavos, obedezcan a sus amos terrenales con respeto y temor, y con integridad de corazón, como a Cristo.
6 No lo hagan sólo cuando los estén mirando, como los que quieren ganarse el favor humano, sino como esclavos de Cristo, haciendo de todo corazón la voluntad de Dios.
7 Sirvan de buena gana, como quien sirve al Señor y no a los hombres,