19 Jesús se dio cuenta de que querían hacerle preguntas acerca de esto, así que les dijo:—¿Se están preguntando qué quise decir cuando dije: “Dentro de poco ya no me verán”, y “un poco después volverán a verme”?
20 Ciertamente les aseguro que ustedes llorarán de dolor, mientras que el mundo se alegrará. Se pondrán tristes, pero su tristeza se convertirá en alegría.
21 La mujer que está por dar a luz siente dolores porque ha llegado su momento, pero en cuanto nace la criatura se olvida de su angustia por la alegría de haber traído al mundo un nuevo ser.
22 Lo mismo les pasa a ustedes: Ahora están tristes, pero cuando vuelva a verlos se alegrarán, y nadie les va a quitar esa alegría.
23 En aquel día ya no me preguntarán nada. Ciertamente les aseguro que mi Padre les dará todo lo que le pidan en mi nombre.
24 Hasta ahora no han pedido nada en mi nombre. Pidan y recibirán, para que su alegría sea completa.
25 »Les he dicho todo esto por medio de comparaciones, pero viene la hora en que ya no les hablaré así, sino que les hablaré claramente acerca de mi Padre.