1 Reciban al que es débil en la fe, pero no para entrar en discusiones.
2 A algunos su fe les permite comer de todo, pero hay quienes son débiles en la fe, y sólo comen verduras.
3 El que come de todo no debe menospreciar al que no come ciertas cosas, y el que no come de todo no debe condenar al que lo hace, pues Dios lo ha aceptado.
4 ¿Quién eres tú para juzgar al siervo de otro? Que se mantenga en pie, o que caiga, es asunto de su propio señor. Y se mantendrá en pie, porque el Señor tiene poder para sostenerlo.