17 ¿No es ahora la siega del trigo? Yo clamaré a Jehová, y él dará truenos y lluvia, para que conozcáis y veáis que es grande vuestra maldad que habéis hecho ante los ojos de Jehová al haber pedido un rey para vosotros.
18 Y Samuel clamó a Jehová, y Jehová dio truenos y lluvia en aquel día; y todo el pueblo temió en gran manera a Jehová y a Samuel.
19 Entonces dijo todo el pueblo a Samuel: Ruega por tus siervos a Jehová tu Dios para que no muramos, porque a todos nuestros pecados hemos añadido este mal de pedir un rey para nosotros.
20 Y Samuel respondió al pueblo: No temáis; vosotros habéis cometido todo este mal, pero con todo eso, no os apartéis de ir en pos de Jehová, sino servid a Jehová con todo vuestro corazón.
21 No os apartéis yendo en pos de las vanidades que no aprovechan ni libran, porque son vanidades.
22 Pues Jehová no desamparará a su pueblo por su gran nombre, porque Jehová ha querido haceros pueblo suyo.
23 Así que, en cuanto a mí, lejos esté de mí que peque yo contra Jehová cesando de rogar por vosotros; antes bien, yo os enseñaré el camino bueno y recto.