5 Entonces los filisteos se reunieron para pelear contra Israel: treinta mil carros, y seis mil hombres de a caballo, y pueblo tan numeroso como la arena que está a la orilla del mar; y subieron y acamparon en Micmas, al oriente de Bet-avén.
6 Cuando los hombres de Israel vieron que estaban en apuros (porque el pueblo estaba en gran aprieto), se escondió el pueblo en cuevas, en fosos, en peñascos, en rocas y en cisternas.
7 Y algunos de los hebreos pasaron el Jordán a la tierra de Gad y de Galaad; pero Saúl estaba aún en Gilgal, y todo el pueblo iba tras él temblando.
8 Y él esperó siete días, conforme al plazo que Samuel había señalado; pero Samuel no llegaba a Gilgal, y el pueblo se desbandaba.
9 Entonces dijo Saúl: Traedme el holocausto y las ofrendas de paz. Y ofreció el holocausto.
10 Y aconteció que cuando él acababa de ofrecer el holocausto, he aquí que Samuel venía; y Saúl salió a recibirle para saludarle.
11 Entonces Samuel dijo: ¿Qué has hecho? Y Saúl respondió: Porque vi que el pueblo se desbandaba, y que tú no venías dentro del plazo señalado, y que los filisteos estaban reunidos en Micmas,