5 Y Sansón descendió con su padre y con su madre a Timnat; y cuando llegaron a las viñas de Timnat, he aquí un cachorro de león vino rugiendo hacia él.
6 Y el espíritu de Jehová vino sobre Sansón, quien lo despedazó como quien despedaza un cabrito, sin tener nada en sus manos; y no contó ni a su padre ni a su madre lo que había hecho.
7 Descendió, pues, y habló a la mujer; y ella le agradó a Sansón.
8 Y volvió después de algunos días para tomarla, y se apartó para ver el cuerpo muerto del león, y he aquí en el cuerpo del león había un enjambre de abejas y un panal de miel.
9 Y lo tomó en sus manos y se fue comiéndolo por el camino; y cuando llegó adonde estaban su padre y su madre, les dio a ellos y comieron, pero no les dijo que había tomado aquella miel del cuerpo del león.
10 Descendió, pues, su padre adonde estaba la mujer, y Sansón hizo allí banquete, porque así solían hacer los jóvenes.
11 Y aconteció que cuando ellos le vieron, tomaron treinta compañeros para que estuviesen con él.