26 Como Dios ayudó a los levitas que llevaban el Arca del pacto de Jehová, sacrificaron siete novillos y siete carneros.
27 Iba David vestido de lino fino, y también todos los levitas que llevaban el Arca, y asimismo los cantores; y Quenanías era maestro de canto entre los cantores. Llevaba también David sobre sí un efod de lino.
28 De esta manera llevaba todo Israel el Arca del pacto de Jehová, con júbilo y sonido de bocinas, trompetas y címbalos, al son de salterios y arpas.
29 Cuando el Arca del pacto de Jehová llegó a la Ciudad de David, Mical, hija de Saúl, estaba mirando por una ventana; al ver al rey David que saltaba y danzaba, lo menospreció en su corazón.