33 Entonces le avisaron a Saúl:—El pueblo está pecando contra Jehová, porque come carne con sangre.Él dijo:—¡Vosotros habéis sido infieles! Rodadme ahora acá una piedra grande.
34 Esparcíos por el pueblo —añadió—, y decidles que me traiga cada uno su vaca y cada cual su oveja; degolladlas aquí y comed, sin pecar contra Jehová por comer la carne con la sangre.Aquella noche cada uno llevó su propio buey y lo sacrificaron allí.
35 Edificó Saúl un altar a Jehová, y ése fue el primero que edificó a Jehová.
36 Dijo Saúl:—Descendamos esta noche contra los filisteos y los saquearemos hasta la mañana; no dejaremos de ellos ninguno.Ellos dijeron:—Haz lo que bien te parezca.Dijo luego el sacerdote:—Acerquémonos aquí a Dios.
37 Y Saúl consultó a Dios: «¿Debo descender tras los filisteos? ¿Los entregarás en manos de Israel?»Pero Jehová no le dio respuesta aquel día.
38 Entonces dijo Saúl:—Venid acá todos los principales del pueblo, averiguad y ved en qué ha consistido este pecado de hoy.
39 ¡Vive Jehová!, que ha salvado a Israel, que aunque se trate de mi hijo Jonatán, de seguro morirá.Y no hubo en todo el pueblo quien le respondiera.