12 por cuanto en él se halló más espíritu, ciencia y entendimiento para interpretar sueños, descifrar enigmas y resolver dudas; esto es, en Daniel, al cual el rey puso por nombre Beltsasar. Llámese, pues, ahora a Daniel, y él te dará la interpretación.
13 Entonces trajeron a Daniel ante el rey. Y dijo el rey a Daniel:—¿Eres tú aquel Daniel de los hijos de la cautividad de Judá, que mi padre trajo de Judea?
14 Yo he oído de ti que el espíritu de los dioses santos está en ti, y que en ti se halló luz, entendimiento y mayor sabiduría.
15 Y ahora trajeron ante mí sabios y astrólogos para que leyeran esta escritura y me dieran su interpretación; pero no han podido interpretarme el asunto.
16 Yo, pues, he oído de ti que puedes interpretar y resolver dificultades. Si ahora puedes leer esta escritura y darme su interpretación, serás vestido de púrpura, llevarás en tu cuello un collar de oro y serás el tercer señor en el reino.
17 Entonces Daniel respondió y dijo al rey:—Tus dones sean para ti; da tus recompensas a otros. Leeré la escritura al rey y le daré la interpretación.
18 »El Altísimo Dios, oh rey, dio a Nabucodonosor, tu padre, el reino, la grandeza, la gloria y la majestad.