2 Alzó los ojos y vio a tres varones que estaban junto a él. Al verlos salió corriendo de la puerta de su tienda a recibirlos, se postró en tierra
3 y dijo:—Señor, si he hallado gracia en tus ojos, te ruego que no pases de largo junto a tu siervo.
4 Haré traer ahora un poco de agua para que lavéis vuestros pies, y luego os recostaréis debajo de un árbol.
5 Traeré también un bocado de pan para que repongáis vuestras fuerzas antes de seguir, pues por eso habéis pasado cerca de vuestro siervo.Ellos dijeron:—Haz como has dicho.
6 Entonces Abraham fue de prisa a la tienda donde estaba Sara, y le dijo:—Toma enseguida tres medidas de flor de harina, amásala y haz panes cocidos debajo del rescoldo.
7 Corrió luego Abraham a donde estaban las vacas, tomó un becerro tierno y bueno, lo dio al criado y éste se dio prisa a prepararlo.
8 Después tomó mantequilla y leche, y el becerro que había preparado, y lo puso delante de ellos. Él se quedó con ellos debajo del árbol, y comieron.