Jeremías 40:1-7 RVR1995

1 Palabra de Jehová que vino a Jeremías, después que Nabuzaradán, capitán de la guardia, lo envió desde Ramá, cuando lo encontró atado con cadenas entre todos los cautivos de Jerusalén y de Judá que iban deportados a Babilonia.

2 Tomó, pues, el capitán de la guardia a Jeremías y le dijo: «Jehová, tu Dios, anunció este mal contra este lugar;

3 y lo ha traído y hecho Jehová según lo había dicho, porque pecasteis contra Jehová y no escuchasteis su voz. Por eso os ha venido esto.

4 Y ahora, he aquí que en este día yo te he librado de las cadenas que tenías en tus manos. Si te parece bien venir conmigo a Babilonia, ven, y yo velaré por ti; pero si no te parece bien venir conmigo a Babilonia, puedes quedarte. Mira, toda la tierra está delante de ti: ve a donde mejor y más cómodo te parezca ir.

5 Si prefieres quedarte, vuélvete a Gedalías hijo de Ahicam hijo de Safán, a quien el rey de Babilonia ha puesto sobre todas las ciudades de Judá, y vive con él en medio del pueblo. O ve a donde te parezca más cómodo ir.» Le dio el capitán de la guardia provisiones y un presente, y lo despidió.

6 Se fue entonces Jeremías a Gedalías hijo de Ahicam, a Mizpa, y habitó con él en medio del pueblo que había quedado en la tierra.

7 Los jefes del ejército que estaban por el campo junto con sus hombres, cuando oyeron que el rey de Babilonia había puesto a Gedalías hijo de Ahicam para gobernar la tierra, y que le había encomendado los hombres, las mujeres y los niños, y los pobres de la tierra que no fueron deportados a Babilonia,