Jeremías 40:4-10 RVR1995

4 Y ahora, he aquí que en este día yo te he librado de las cadenas que tenías en tus manos. Si te parece bien venir conmigo a Babilonia, ven, y yo velaré por ti; pero si no te parece bien venir conmigo a Babilonia, puedes quedarte. Mira, toda la tierra está delante de ti: ve a donde mejor y más cómodo te parezca ir.

5 Si prefieres quedarte, vuélvete a Gedalías hijo de Ahicam hijo de Safán, a quien el rey de Babilonia ha puesto sobre todas las ciudades de Judá, y vive con él en medio del pueblo. O ve a donde te parezca más cómodo ir.» Le dio el capitán de la guardia provisiones y un presente, y lo despidió.

6 Se fue entonces Jeremías a Gedalías hijo de Ahicam, a Mizpa, y habitó con él en medio del pueblo que había quedado en la tierra.

7 Los jefes del ejército que estaban por el campo junto con sus hombres, cuando oyeron que el rey de Babilonia había puesto a Gedalías hijo de Ahicam para gobernar la tierra, y que le había encomendado los hombres, las mujeres y los niños, y los pobres de la tierra que no fueron deportados a Babilonia,

8 se presentaron a Gedalías, en Mizpa. Eran: Ismael hijo de Netanías, Johanán y Jonatán hijos de Carea, Seraías hijo de Tanhumet, los hijos de Efai, el netofatita, y Jezanías, hijo de un maacateo; todos ellos junto con sus hombres.

9 Y Gedalías hijo de Ahicam hijo de Safán les juró a ellos y a sus hombres, diciendo: «No tengáis temor de servir a los caldeos. Habitad en la tierra, servid al rey de Babilonia y os irá bien.

10 Y he aquí que yo habito en Mizpa, para tratar con los caldeos que vendrán a nosotros. Pero vosotros tomad el vino, los frutos del verano y el aceite, ponedlos en vuestros almacenes y quedaos en vuestras ciudades que habéis tomado.»