15 E hizo deportar Nabuzaradán, capitán de la guardia, a los pobres del pueblo, a toda la otra gente del pueblo que había quedado en la ciudad, a los desertores que se habían pasado al rey de Babilonia y a todo el resto de la multitud del pueblo.
16 Pero Nabuzaradán, capitán de la guardia, dejó de los pobres del país para que fueran viñadores y labradores.
17 Los caldeos quebraron las columnas de bronce que estaban en la casa de Jehová, las basas y el mar de bronce que estaba en la casa de Jehová, y llevaron todo el bronce a Babilonia.
18 Se llevaron también los calderos, las palas, las despabiladeras, los tazones, las cucharas y todos los utensilios de bronce usados en el culto,
19 los incensarios, tazones, copas, ollas, candelabros, escudillas y tazas; tanto lo de oro como lo de plata, se lo llevó el capitán de la guardia.
20 En cuanto a las dos columnas, el mar y los doce bueyes de bronce que estaban debajo de las basas que había hecho el rey Salomón en la casa de Jehová, el peso de todo este bronce resultó incalculable.
21 Respecto a las columnas, la altura de cada una de ellas era de dieciocho codos, y un cordón de doce codos la rodeaba. Su espesor era de cuatro dedos, y eran huecas.