18 Luego dijo a Zeba y a Zalmuna:—¿Qué aspecto tenían aquellos hombres que matasteis en Tabor?Ellos respondieron:—Como tú, así eran ellos; cada uno parecía hijo de rey.
19 Entonces Gedeón gritó:—Mis hermanos eran, hijos de mi madre. ¡Vive Jehová, que si les hubierais conservado la vida, yo no os mataría!
20 Y dijo a Jeter, su primogénito:«Levántate y mátalos.»Pero el joven no desenvainó su espada, porque tenía temor, pues aún era muchacho.
21 Entonces dijeron Zeba y Zalmuna:«Levántate y mátanos tú, porque según es el hombre, así es su valentía.»Gedeón se levantó, mató a Zeba y a Zalmuna y tomó los adornos de lunetas que sus camellos traían al cuello.
22 Los israelitas dijeron a Gedeón:—Sé tú nuestro señor, y también tu hijo y tu nieto, pues que nos has librado de manos de Madián.
23 Pero Gedeón respondió:—No seré señor sobre vosotros, ni lo será mi hijo. Jehová será vuestro Señor.
24 Y añadió:—Quiero haceros una petición: que cada uno me dé los zarcillos de su botín (pues traían zarcillos de oro, porque eran ismaelitas).