9 No devolváis mal por mal, ni maldición por maldición, sino por el contrario, bendiciendo, sabiendo que fuisteis llamados a heredar bendición,
10 porque:«El que quiere amar la viday ver días buenos,refrene su lengua de maly sus labios no hablen engaño;
11 apártese del mal y haga el bien;busque la paz y sígala,
12 porque los ojos del Señorestán sobre los justos,y sus oídos atentos a sus oraciones;pero el rostro del Señor está contra aquellos que hacen el mal.»
13 ¿Quién es aquel que os podrá hacer daño, si vosotros seguís el bien?
14 Pero también si alguna cosa padecéis por causa de la justicia, bienaventurados sois. Por tanto, no os amedrentéis por temor de ellos, ni os inquietéis.
15 Al contrario, santificad a Dios el Señor en vuestros corazones,, y estad siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros.