19 Llegó a Éfeso y los dejó allí; y entrando en la sinagoga, discutía con los judíos.
20 Estos le rogaban que se quedara con ellos más tiempo, pero él no accedió,
21 sino que se despidió de ellos, diciendo:—Es necesario que en todo caso yo celebre en Jerusalén la fiesta que viene; pero otra vez volveré a vosotros, si Dios quiere.Y zarpó de Éfeso.
22 Habiendo llegado a Cesarea, subió para saludar a la iglesia y luego descendió a Antioquía.
23 Después de estar allí algún tiempo, salió y recorrió por orden la región de Galacia y de Frigia, animando a todos los discípulos.
24 Llegó entonces a Éfeso un judío llamado Apolos, natural de Alejandría, hombre elocuente, poderoso en las Escrituras.
25 Éste había sido instruido en el camino del Señor; y siendo de espíritu fervoroso, hablaba y enseñaba diligentemente lo concerniente al Señor, aunque solo conocía el bautismo de Juan.