5 A ellos también pertenecen los patriarcas, de los cuales, según la carne, vino Cristo, el cual es Dios sobre todas las cosas, bendito por los siglos. Amén.
6 No que la palabra de Dios haya fallado, porque no todos los que descienden de Israel son israelitas,
7 ni por ser descendientes de Abraham, son todos hijos suyos, sino: «En Isaac te será llamada descendencia.»
8 Esto es: no son hijos de Dios los hijos según la carne, sino que son contados como descendencia los hijos según la promesa,
9 pues la palabra de la promesa es ésta: «Por este tiempo vendré y Sara tendrá un hijo.»
10 Pero no solo esto, pues también Rebeca concibió de un solo hombre, de Isaac nuestro padre.
11 No habían aún nacido, ni habían hecho aún ni bien ni mal (para que el propósito de Dios conforme a la elección permaneciera, no por las obras sino por el que llama),