5 Respondió Jesús:—De cierto, de cierto te digo que el que no nace de agua y del Espíritu no puede entrar en el reino de Dios.
6 Lo que nace de la carne, carne es; y lo que nace del Espíritu, espíritu es.
7 No te maravilles de que te dije: “Os es necesario nacer de nuevo.”
8 El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido, pero no sabes de dónde viene ni a dónde va. Así es todo aquel que nace del Espíritu.
9 Le preguntó Nicodemo:—¿Cómo puede hacerse esto?
10 Jesús le respondió:—Tú, que eres el maestro de Israel, ¿no sabes esto?
11 De cierto, de cierto te digo que de lo que sabemos, hablamos, y de lo que hemos visto, testificamos; pero no recibís nuestro testimonio.